lunes, 1 de diciembre de 2008

Fernando Marías, ESTA NOCHE MORIRÉ



Cómo no comprar -y además leer- un libro escrito por uno de los hermanísimos de, con un título tan sugerente, una portada tan llamativa y que empieza diciendo "Me suicidé hace dieciséis años". El resultado, un poco agridulce. Admirable la valentía de un autor que se ha propuesto un plan casi irrealizable. La novela es una carta escrita por un dirigente de una organización criminal poderosísima quien se encarga de que ésta llegue al comisario de policía que lo encerró en el preciso momento en que éste, que habrá sufrido una serie de penalidades dispuestas por el autor de la carta, esté a punto de suicidarse también. Hay que tener narices para atreverse con una novela así. Y, la verdad, es que casi lo consigue pero no, no nos lo acabamos de creer. Por otro lado, alguna escena es de una violencia demasiado desagradable que lejos de contribuir a hacer más creíble la novela (o a su protagonista) me la ha hecho más rechazable. Con todo, hay que reconocer el mérito de la obra.